AZUL PERDEDOR
- Me encuentro paseando por un zoológico, pero es un sitio donde solo exhiben grandes simios, negros, amenazantes, amedrentantes; primero camino tranquilamente, pero a medida que avanzo las caras cada vez son mas agresivas, se siente una mirada acusadora por estar mas adelante en la cadena evolutiva, hay un ambiente tenso y sonidos metálicos provenientes de las jaulas que parecen a punto de caer vencidas por los brazos de los simios, es por eso que no aguanto la presión y me volteo a buscar ayuda en el grupo que caminaba conmigo, cuando lo hago siento mas angustia de la que tenia, pues a pesar de ser conocidos, todos los que me acompañan tienen enfundadas esas horribles camisetas color azul derrota, son todos hinchas de millonarios. Ahí doy gracias a Dios que el episodio es un sueño, por que si no lo fuera no se sabría a que simios se le debe tener mas miedo si a los encerrados o a los vestidos de azul.-
Aunque no suelo querer interpretar mis sueños, si quisiera dar mi explicación a esta angustiosa pesadilla, para que los lectores entiendan mi parcial, pero absolutamente razonable explicación al sueño y a mi azulfobia, Me perdonarán mis amigos albiazules, que puedo contar con la mano, no trato de herir susceptibilidades, yo se que ustedes no son culpables de esa penosa enfermedad que portan.
Todo aquel que visceralmente es hincha de un equipo de fútbol, es también un antihincha del equipo “compañero” de plaza, es un odio-envidia que aquellos que viven en ciudades pequeñas con un solo equipo nunca llegarán a entender. Un equipo de fútbol es en esencia el representante deportivo de una ciudad, cuando existen dos en la misma urbe las hinchadas deben competir continuamente por demostrar que es su equipo el que con mayor orgullo y pundonor defiende la bandera, los himnos y en general la manera de vivir y la cultura de su ciudad, Las dos hinchadas teniendo como arma a su equipo se luchan el amor impávido de su ciudad.
En mi caso soy hincha del Independiente Santa Fe, Primer campeón del fútbol de Colombia; Pero no quiero hablar aquí de las infinitas virtudes del equipo que me llevaron a ser hincha del cardenal equipo, quiero hablar de porque soy antihincha de Millonarios, por que para eso hay también incontables razones, de las cuales describiré unas pocas simplemente para enmarcar lo desagradable que puede resultar un sueño atestado de hinchas de Millonarios.
En Cuanto a los sueños, pues bueno, estos se están convirtiendo no simplemente en los sujetos y objetivos de la narración, sino que han venido mutando para convertirse en tema de inspiración y punto de partida para los escritos de este blog.
Volviendo al tema, Una historia corta… Millonarios es un equipo que nació de la envidia de un grupo de taxistas y carniceros que no resistían ver como el mas tradicional y cachaco de los colegios de Bogota – Gimnasio Moderno – tenia un equipo de fútbol que adquiría la fama de un banda de rock; decidió entonces este grupejo conformar su propia escuadra “Atlético Municipal” que con el tiempo cuando tomo fuerza se terminó llamando “Club deportivo Los Millonarios”, un nombre por mas no decir, ridículo, producto de la envidia que generaba la clase social del equipo del Gimnasio Moderno, que mas adelante tomaría el refinado, noble y elegante nombre “Independiente Santa Fe”. Fue algo tan simple como la mujer de poca estatura que usa zapatos de tacón, o la que tiene pocas tetas y decide rellenar su sostén con trapos para tener algo que mostrar. Esta gente decidió ponerle “Los Millonarios” a su equipo para poderse igualar en posición social a sus compañeros de plaza, así fuera solo en el nombre. En fin, la gente del gimnasio moderno creo su equipo para jugar fútbol, los otros, lo crearon teniendo como motivación no ser menos, lo crearon y lo nombraron llenos de resentimiento.
Tiempo después, por allá en 1948 se realiza el primer torneo, y para acabar de alimentar los resentimientos y odios de estos azulejos Bogotanos, Santa Fe se corona como primer campeón del fútbol profesional colombiano.
Millonarios no resiste el peso y se dedica por fin a jugar fútbol; entre 1949 y 1978 logra 11 títulos nacionales convirtiéndose en el equipo con mas estrellas, a partir de ese momento pasan 9 años sin conocer triunfos, y como a los millonarios levantados que no les parece suficiente todo lo que tienen, estos resentidos acaban de teñir su historia “administrativa” y se cagan en la historia deportiva, comprando con dineros del narcotráfico los títulos de 1987 y 1988 consecutivamente, uno de ellos robando descaradamente a su rival de patio en un partido donde sobornaron a tres jugadores Argentinos del Santa Fe para que no hicieran lo suyo.
Desde ahí Millonarios no ha sido mas que un remedo de equipo que en ocasiones se puede confundir con el circo de los hermanos gasca o inclusive con un grupo de bailarinas, tanto que ellos mismos se tienen el remoquete de “Ballet azul”… otro intento mas de verse refinados con un resultado bastante gay; y que decir de sus hinchas… viven orgullosos de 13 estrellas mal logradas (Los muy pocos hinchas humanos y decentes de millonarios deberían hacer una campaña para borrar esas dos estrellas robadas del escudo para ver si así logran un poco de dignidad) así como las mujeres que viven orgullosas de sus tetas llenas de silicona.
El mundo de hoy vive lleno de problemas y resentimientos, y directamente proporcional a los problemas de la sociedad la hinchada de millonarios sigue creciendo, aumentando con ellos la xenofobia (no resisten jugadores paisas en su equipo), la violencia (la barra de los comandos azules es quizá una de las mas violentas del país) las malas costumbres, y…. no digo mas para no ser eterno y aburridor contando todos los males de este grupo de fulanejos que tuvo su origen en la envidia y el resentimiento de un grupo de decentes jugadores de fútbol del Gimnasio Moderno.
Que parecidos eran los simios del sueño a esos simios que se empelotan en la lateral norte a intentar romper los tubos de las barandas de contención, todos esos simios que le quieren gritar al mundo que ellos son millonarios.